14 May Con la ayuda del Rotary Club de Ibiza, los enfermos d Alzheimer estrenan local
Alzheimer y, sobre todo, sus familiares, dieron ayer un paso adelante hacia la mejora de su calidad de vida gracias a la inauguración del nuevo local de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer, en el número 63 de la avenida de Isidor Macabich de Ibiza. Junto a la puesta en marcha de estas nuevas dependencias, se estrena también un nuevo horario de atención a sus usuarios, más amplio que hasta ahora, y se ofrecen también más talleres y actividades.
Se trata de una planta baja de unos 90 metros cuadrados, con dos dependencias principales, una cocina y un cuarto de baño. Aunque modesta, se trata de una instalación que «supone una importante mejora respecto a lo que teníamos antes», señalaba la presidenta de la entidad, Rosa María Sánchez. La asociación debía compartir hasta ahora espacio con otras muchas entidades en los locales de la Plataforma Sociosanitaria de Ibiza, en la calle de Madrid.
Al acto asistieron representantes de todos los ayuntamientos de la isla, del Consell y del Govern balear, al objeto de dar testimonio de su apoyo a la labor de esta entidad, que atiende a más de un centenar de personas en la isla.
Sánchez destacó que la apertura del local ha sido posible gracias a las
donaciones efectuadas por la Fundación la Caixa, el Rotary Club, la Fundación Abel Matutes, la Fundación Julián Vilás y la Imprenta Manonelles, que han aportado dinero y mobiliario o bien han costeado las obras de reforma. «Gracias a ellos, hemos visto este sueño hecho realidad», afirmaba exultante la presidenta de la asociación, que no paraba de atender a algunos usuarios que iban llegando a este nuevo punto de encuentro.
Sin embargo, Rosa María Sánchez recalcó ante este diario que la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer «necesita mucho más para poder continuar adelante», por lo que consideró
necesaria la ayuda económica de los ayuntamientos y del Consell. «Necesitamos que sus subvenciones sean mayores de lo que son», recalcó la presidenta.
Cinco personas atenderán este local, aunque no por ello dejarán de realizarse las visitas de ayuda a domicilio que llevan a cabo los trabajadores de esta entidad, tal y como recordó la educadora social Nélida Balbuena.
El objetivo del local y sus trabajadores es que los familiares «puedan tomarse un respiro» en el cuidado de sus seres queridos con alzhéimer. De hecho, las dependencias se llaman Unidad de Respiro. «Podrán tener cuatro horas y media para irse a tomar un café, ir al gimnasio, hacer las compras o vivir un poco», afirmó la presidenta, quien recordó que «vivir las 24 horas del día con un enfermo es muy duro», por la atención constante que requiere.
Frente a los
dos días semanales que podía disfrutarse hasta ahora de este servicio, el nuevo local permitirá atender a los enfermos todos los días de lunes a viernes, en horario de mañana.
Clases, musicoterapia, paseos terapéuticos o lectura son algunas de las actividades que se realizarán en los talleres de la sala principal, con capacidad para una quincena de personas, aproximadamente.]]>